EVALUACIÓN DEL POAT

 

La evaluación que se llevará a cabo del POAT será:

"continua, formativa y sistemática"

 

¿Qué evaluar?

El tutor o la tutora observará si sus alumnos/as van asimilando los conceptos sin dificultad y qué niños/as necesitan más ayuda. Para ello, llevará a cabo una atención individualizada. Además de evaluar contenidos y procedimientos, evaluará las actitudes, los intereses, los valores, los hábitos de comportamiento, la participación en clase, la relaciones con los compañeros/as...

 

¿Cuándo evaluar?

En un primer momento, se llevará a cabo una evaluación inicial, para realizar, si es necesario, una adaptación de los objetivos planteados en dicho programa, a cada grupo particular de alumnos/as.

 La evaluación procesual permitirá la valoración del desarrollo de los aprendizajes de los alumnos/as, a través de la recogida de datos sistemática. La ventaja de todo ello es que permitirá llevar a cabo una enseñanza personalizada al mostrar las diferencias en el ritmo de aprendizaje de los alumnos/as. En función de estas diferencias, será posible emprender acciones: de apoyo a los alumnos/as en los que se observen dificultades y de desarrollo para aquellos cuya capacidad o interés en el trabajo haya ocasionado una evolución más rápida.     

¿Cómo evaluar?
La observación directa se convierte, por lo general, en el mejor recurso para llevar a la práctica la evaluación de los alumnos/as. Pero no solo deben ser ellos objeto de la evaluación, puesto que debemos medir también el grado de eficacia de nuestros planteamientos educativos reflejados en este programa, y como no, analizar nuestra propia intervención educativa durante la puesta en práctica del mismo.